¿Qué es el autocuidado y cuál es su importancia?

 

En cualquier etapa de nuestra vida solemos cumplir metas y objetivos, ya sea a corto o a largo plazo, por eso mismo vamos a poner atención a nuestras exigencias y mediante este camino, iremos desarrollando habilidades a través del tiempo, experimentando situaciones nuevas que nos conllevará a ser espectadores y participantes.

Nacerá un comportamiento innato que tomará control de nuestras propias decisiones ante situaciones, ya sean riesgosas o contingentes; es decir una iniciativa propia de acción que podrá controlar factores internos o externos y que pueden comprometer nuestra vida y desarrollo. (Díaz, et al., 2003). El autocuidado, llamada también asistencia personal sanitaria.

Origen del autocuidado

Desde nuestros orígenes, la protección que teníamos hacia nosotros mismos se convirtió en una actividad importante para la supervivencia y adaptación frente a los peligros.

Tener los cuidados propios son funciones necesarias e indispensables para la vida, es un componente innato para la supervivencia del ser humano. El propio cuidado sirve para promover y desarrollar a las personas a continuar viviendo, representa protección o establecer un conjunto de actos con el objetivo de que la vida se mantenga y se desarrolle.

A lo largo de la historia los seres humanos han desarrollado distintas actitudes o prácticas socioculturales de autoprotección. Así mismo, la cultura griega donde consideraban que las prácticas de cuidados formaban parte de la vida y no solo era el deber de cuidarse el cuerpo sino también el alma. Con el tiempo se pudo comprender mejor los actos de protección de sí mismo, se pudo asumir con responsabilidad frente a este, desarrollando un patrimonio de actitudes y acciones.

El estoicismo y el autocuidado

El estoicismo como corriente filosófica, generó un gran desarrollo respecto al autocuidado. "El cultivo de sí" así se denominaba a las actividades que tenían las personas consigo mismo donde el principal principio era cuidarse y respetarse a sí mismo. Marco Aurelio, Seneca y Epicteto, quienes fueron uno de los representantes del Estoicismo, otorgaron condiciones sobre el cuidado de sí mismo.

Para Epicteto, "La inquietud de sí" éste era un privilegio del ser humano y a la vez un don que nos aseguraba la libertad para que nos preocupemos por nosotros y nos obligue a tomarnos como objeto de toda aplicación. 

Foucault, a su vez desde su perspectiva se apoyaba con "el cuidado de sí y el cuidado de los otros" como un conjunto de prácticas, en la cual el individuo empieza a relacionarse más consigo mismo y esa misma relación establece a un sujeto de sus propias acciones.

En otras palabras, podemos interpretar que el mismo individuo es libre, y esa libertad permite ocuparse de sí mismo; no obstante, como individuo, es el único que puede tener ese privilegio y por ende, es un deber ocuparse de uno mismo. Eso quiere decir que mientras más libres somos, más nos ocuparemos de nosotros, permitiendo estar en una posición de ventaja respecto a los demás.Significa poder dirigirse desde afuera, desde el exterior, desde todas las cosas externas hacía uno mismo.

Preocuparse de sí mismo son aquellas actividades que uno realiza sobre sí. Foucault nos manifiesta desde la Hermenéutica del sujeto: "uno se preocupa de sí para sí mismo, y es en esta preocupación por uno mismo en donde este cuidado encuentra su propia recompensa"

El cuidado de sí permite que los individuos efectúen por cuenta propia una cantidad de operaciones o actividades sobre su cuerpo, su alma sus pensamientos y conductas con el fin de tener una transformación de sí mismo, alcanzando la felicidad y la sabiduría.

El concepto del autocuidado

La pobre práctica y la deshumanización de la atención médica realizada en los finales de los 60' y principios de los 70', fueron causantes de movimientos sociales para promover la autoayuda y el bienestar, naciendo así el término "autocuidado". 

Este movimiento social llamado "Autocuidado" tuvo como la finalidad de contrarrestar la hegemonía médica desde entonces, aunque también logró interpretarse como una estrategia para reducir el uso de servicios de salud cuyos costos iban en aumento de manera exagerada. 

Las personas deberían de adoptar un rol activo ante sus enfermedades, los pacientes de los hospitales empezaban a tomar más control sobre sus vidas para tener mayor calidad de vida. Ya a principios del siglo XXI, la OMS concede la importancia de tener participación activa sobre los cuidados básicos de nuestra salud, de protegernos más y prevenir enfermedades. 

Uno de los primeros conceptos del autocuidado, fue asignado por Levin, " El autocuidado es aquel procedimiento donde la persona llega a poner en práctica, de manera eficaz conductas o acciones de identificación y prevención de las enfermedades, así  como también la promoción, aplicando tratamientos primarios para la salud"

Esta descripción hace que el autocuidado sea una práctica separada del dominio del sistema del cuidado de salud profesional.

Deán, afirma también que el autocuidado es un estilo de vida, es una práctica innata y que desprende independientemente de los profesionales de la salud,  aunque también puede actuar en forma conjunta.  En ese sentido, se considera que el Autocuidado es de libre determinación, la libre decisión de consultar a un profesional de salud es considerado una dimensión del autocuidado.

El autocuidado se define como tomar medidas para cuidar de nosotros mismos y de nuestras necesidades físicas, emocionales, mentales, financieras y ambientales. Es cualquier acción que se tome para respaldar nuestro bienestar general. El autocuidado es relativo: así como cada ser humano es único, el autocuidado es diferente para cada uno de nosotros.

La forma en que te cuidas a ti mismo, no es la misma forma en otra persona. El autocuidado también varía día a día. A veces necesitamos un momento para estar quietos y reflexionar, otras veces necesitamos movernos, estar con familiares y amigos, ejercitarnos. Hay algo que debes incorporar en tu vida, y eso es el autocuidado. El autocuidado es escucharse, darse una respuesta honesta y hacer lo que está bien para ti en el momento en que te estás preguntando ¿Cómo puedo ser bueno conmigo mismo?

"El autocuidado es un sin fin de acciones innatas de la misma persona para tomar conciencia de factores tanto protectores y de riesgo, donde seremos participantes activos sobre nuestra vida y desarrollo"

Dorothea E Orem en 1969, fue una enfermera  estadounidense, creadora de la teoría  del déficit del autocuidado y la que asignó el término hoy en día conocido como el autocuidado. “el conjunto de acciones intencionadas que realiza la persona para controlar los factores internos o externos que pueden comprometer su vida y desarrollo posterior”

Consignando la palabra agente  de autocuidado como aquella acción especifica que realiza la persona con madurez para cuidarse y protegerse. Entonces, la agencia de autocuidado sería una capacidad y/o habilidad donde el individuo deberá potenciar. 

¿Por qué es importante el autocuidado?

Cuando ya hablamos de autocuidado, quiere decir que hablamos de asistencia o atención primaria y es importante porque desarrolla la productividad del ser humano; es decir mejora y aumenta tu crecimiento, como también la regularización del comportamiento con un fin benéfico personal, obteniendo capacidad de reflexión y autoconocimiento. Te ayuda a priorizar el tiempo más adecuado para el desarrollo personal.

Estilo de vida saludable: Son patrones de comportamiento que la persona aplica en su modo de vivir, las mismas deben permanecer con el tiempo, generando un desarrollo pleno y bienestar general. El estilo de vida saludable va a depender de factores internos: como pensamientos, capacidad reflexiva, emociones, habilidades y actitudes;  y factores externos: contexto familiar, agentes sociales, culturales y medio ambiente. 

Aumenta tu Autoestima; nos tratamos bien y satisfacemos nuestras necesidades de una manera reguladora con un control de excesos, desarrollando así un diálogo interno, mejorando la habilidad de autoaceptación y autoconcepto.

Podemos concluir que a pesar que el autocuidado existe desde tiempos remotos, y es una actitud innata del ser humano que ha facilitado el instinto de supervivencia, desarrollándose en distintas áreas culturales, políticos, sociales y económicos; es entendible que ha sido la más olvidada sin haber recibido la mayor importancia, por lo tanto ha generado no facilitar la conciencia suficiente para asumir responsabilidades de si mismos. 

El autocuidado es una estrategia que cada persona debe asumir con responsabilidad para su cuerpo y mente, Es necesario acudir con educación, orientación en ambientes protectores y favorables con el fin de tener un adecuado desarrollo personal.